“EL PAISAJE NO PAISAJE”
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhbMD4-CqXdw3sZZbObCSpeCq0_ghrxUr5lxAteRnPH-omEfHEQ4K7-KTG2pb3d3F1rCkW15ZTWGgG1jqRgO9wejwWNsc7CEBVGnOi8E07Bx1UfMiUO4V3pGjeO-hq2HuwSVljTU5MYm7E/s400/IMG_2470.jpg)
Si observamos este cuadro, de entrada nos remite a una abstracción, a una cosa que no
podemos nombrar de una manera clara y
si le damos la oportunidad a la pintura
de que nos hable y nos toque, podremos
experimentar la armonía sin nombre de la textura el color y la composición
mucho antes de que la mente diga: “paisaje”; esto se debe a la naturaleza de la mente “lógica” de nombrar, clasificar y archivar, porque naturalmente esto que vemos lo va a
clasificar como “paisaje”, sin embargo, se va a intrigar con esos hilos raros que no checan y le
quitan un poco esa condición y, entonces, quizá se sonría y lo considere
un requiebro o un juego.
Independientemente de este análisis, la pintura nos podría gustar por la armonía
en los colores, la simetría de las
formas e incluso por la evocación a un paisaje.
Exactamente lo mismo
sucede con esta pintura, aunque evidentemente los símbolos “paisaje” están más definidos y obvios.
Y lo mismo sucede con esta pintura, donde la evocación es una caverna o algo así.
No hay comentarios:
Publicar un comentario