Me invitó “Coco Payán” a una exposición donde el tema era
“Rumberas del Cine Nacional”; me pareció un tema poco convencional y divertido.
El tema en sí habla de un tiempo en México “Adolescente”, o
eso me parece -guapas mujeres rotundas, festivas, coquetas, disfrazadas como
se disfrazarían unas chiquillas de 14 años jugando en una pijamada.
Hay en todas ellas, “las rumberas”, un dejo de adolescentes traviesas juguetonas y divertidas.
El tema en sí mismo, como en otras ocasiones, tiene para mí un
detonador para pintar, que es el
movimiento; el movimiento que genera el ritmo acelerado de la rumba, del mambo, son ritmos donde interviene todo el cuerpo: las manos, las caderas, los brazos... Las
rumberas adquieren poses muy buscadas, coquetas y repetidas; el cuerpo quebrado en
la cintura y la cadera respingada, con
sus adornos en forma de pompones y una especie de cola falda que cae hasta el
suelo y ambas pompón y cola responden rítmicamente a los movimientos de la
cadera. La gran melena al aire enmarca
la risueña y bella cara que la hace más pequeña y femenina.
Los senos en esta ocasión no son los protagonistas, apenas
adornados, juegan un papel secundario.
Los brazos y piernas descubiertas
se vuelven la femineidad extrema… No es la rotunda y profunda del “cante” de la
bailaora de flamenco, no es el cisne blanco del ballet... es el caribe juguetón y divertido. Es el
mestizo jugando a negro.
Busqué en internet las imágenes de estas “Diosas” míticas
del cine nacional de los años 40s y 50s, busqué unas cuantas poses y las repetí libremente
buscando la sorpresa, la intuición, el libre movimiento del color, la textura – resultó muy divertido pintarlas mientras
escuchaba y bailaba estos sabrosísimos ritmos tropicales. Pensaba simplemente
pintarlas para mí como otras pinturas en
movimiento que he hecho (unos
futbolistas:
y unos jarochos que estoy pintando )… sin embargo, en el último momento -30 de junio a las 22 horas- faltaban tres horas para vencer el plazo, decidí enviar la cédula y las fotos… no se si entraron en la exposición, no me han respondido.
y unos jarochos que estoy pintando )… sin embargo, en el último momento -30 de junio a las 22 horas- faltaban tres horas para vencer el plazo, decidí enviar la cédula y las fotos… no se si entraron en la exposición, no me han respondido.
Independientemente de ello, les muestro las pinturas de estas
rumberas de color y papel… muy divertidas y alegres… seguramente les van a
encantar.
Ricardo
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